Rituales de Luz y fuego

20100404-125

Semana Santa en Sevilla y el privilegio de vivirla desde dentro, balcón y cofradía del Cristo del Gran Poder. Una calle estrecha, la fiesta popular, el gentío engalanado de domingo, trajes de chaqueta, pelo engominado, vestidos negros dibujando curvas y altivas mantillas paseando del brazo. Toda una ciudad volcada y colapsada por enormes procesiones, miles de nazarenos acompañando imágenes sagradas, tronos refulgentes que bailan suspendidos sobre la cerviz de los costaleros, Jesús y María, madre e hijo, divinidad femenina y masculina, una saeta eleva su oración cantada, incienso, trompetas y tambores. Oscuridad rota por la luz de los cirios.

Y en la fervorosa “Madrugá” pasan por mi mente como destellos imágenes luminosas de otros lugares y otros ritos, vividos o conocidos.

Delfos, Grecia siglo V a.C. Procesiones para honrar a los dioses de cada tribu, las ciudades estado compiten por mostrar su poder con los tesoros que depositan en sus templos. Incienso, fuego, candiles, trompetas y tambores, cantos sagrados. En el ombligo del Mundo una Pitia aspira el gas sagrado y azul que emana de una grieta.

Madrugada del sábado al domingo de resurrección, Jerusalen, un sacerdote ortodoxo ora en la edícula del Santo Sepulcro hasta que brota una llama azul, enciende los primeros cirios y de allí se reparte la luz de Cristo a los  presentes. Se agitan campanas, suenan los cánticos.

Vigilia Pascual en San Lorenzo de el Escorial. Basílica en tinieblas, en el patio arde una hoguera, el prior enciende el cirio pascual y el templo se va iluminando cirio a cirio cuando la Lux Mundi se extiende entre los fieles. El coro entona un himno de Gloria.

Tenochtitlan, México 1507, año “2 caña” del quinto sol “terremoto o temblor”.  Se inicia un nuevo ciclo de 52 años con la Ceremonia de año nuevo. Tras los 5 últimos días nefastos, y con la ciudad a oscuras, se enciende la hoguera en el monte Estrella y de ella toman el fuego los sacerdotes de los cuatro barrios, uno por tribu, que en procesión se dirigen a sus templos y de cada altar se toma la llama que enciende nuevamente los hogares. Fuego, luz incienso, trompetas y tambores…

Cientos de miles de años antes un rayo quema una zarza ante los ojos asombrados de un grupo de humanos prendiendo la llama del conocimiento: fuego, luz, calor, vida, poder y esperanza.

Cantos y tambores.

 

Fotos: Carlos Manterola y Xiu (imagen mujer azteca)

Ceremonia Fuego Nuevo 1507. Códice Borbónico, 1562

 


Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s